Cumplía 18 años: la tragedia de Rodrigo Saúl en el Libramiento Rosas Magallón
- Buzo Caperuzo
- 16 sept
- 1 Min. de lectura

Tijuana.– El 16 de septiembre debería haber sido un día de celebración para Rodrigo Saúl Rivas Valladares. Acababa de cumplir 18 años, la edad en que la mayoría de edad abre las puertas de la vida adulta. Sin embargo, la tarde de ese mismo martes, su historia se apagó de forma abrupta y dolorosa en el Libramiento Rosas Magallón.
El joven conducía un Toyota Corolla blanco con placas nacionales cuando, de acuerdo con los primeros informes, perdió el control de la unidad a la altura de la rampa Santo Degollado. El vehículo impactó contra un puente de concreto y terminó en un canal a un costado de la vialidad.

Cuando los paramédicos de la Cruz Roja llegaron, confirmaron lo inevitable: Rodrigo ya no tenía signos vitales. Su madre arribó minutos después y lo identificó entre sollozos, mientras su padre y otros familiares, incrédulos, lamentaban que la vida se le escapara justo el día en que debía comenzar una nueva etapa.
La Fiscalía General del Estado tomó conocimiento del caso y personal de Servicios Periciales se encargó del levantamiento del cuerpo, que fue trasladado al Servicio Médico Forense para la necropsia de ley.

El accidente no solo dejó una huella en el asfalto, sino una herida profunda en una familia que esperaba celebrar un cumpleaños, y terminó despidiendo a un hijo. La pregunta inevitable resuena: ¿cuántas vidas más jóvenes tendrán que perderse en las vialidades de Tijuana antes de que la imprudencia y la velocidad dejen de teñir de luto los días que deberían estar llenos de esperanza?








Comentarios