Volcadura sin dueño: el misterio que amaneció sobre la Avenida Internacional

Tijuana.— El sol de la mañana apenas se filtraba entre las nubes cuando el asfalto de la Avenida Internacional se convirtió en escenario de un accidente tan silencioso como inquietante. Un Toyota Camry negro, con placas de California, yacía volcado a la altura de la planta internacional de tratamiento de aguas, en dirección a la Zona Centro.

La escena tenía todo menos protagonistas. Ni conductor, ni pasajeros, ni testigos inmediatos. Solo el vehículo, herido y torcido sobre su costado, como si hubiera sido dejado a su suerte en medio de la vía.

Elementos del Cuerpo de Bomberos y la Policía Municipal llegaron con rapidez, esperando encontrar heridos atrapados o peatones auxiliando… pero hallaron únicamente el eco de un accidente ya consumado. El interior del auto, desordenado, parecía congelado en un segundo exacto de caos; afuera, el tránsito se acumulaba mientras curiosos trataban de adivinar la historia detrás.

La vialidad fue cerrada parcialmente para retirar el vehículo, cuya presencia —y la ausencia de su conductor— dejó más preguntas que respuestas. El misterio se disolvió en el ruido de las grúas y el regreso paulatino del tráfico, pero la imagen del Camry abandonado seguirá flotando en la memoria de quienes lo vieron, como un recordatorio de que, en las calles de Tijuana, no todos los accidentes terminan con un parte médico… algunos terminan con un silencio inquietante.