De un asalto a una persecución: menores y una joven terminan chocados tras despojar a conductor de Uber

Tijuana.— La noche del viernes en la Zona Norte, las luces de neón de la calle Coahuila apenas alcanzaban a iluminar lo que pronto se volvería una escena de crimen. Tres personas —dos menores de edad y una joven de 19 años— abordaron un Uber en un Kia Rio blanco con placas C29-NW-B3. Minutos después, con una navaja en mano, despojaban al conductor de la plataforma, dejándolo con el miedo en la garganta y sin su vehículo.

El reporte no tardó en llegar a las autoridades. Sobre la avenida Madero, agentes municipales localizaron el auto y, al intentar interceptarlo, el conductor pisó el acelerador: comenzó entonces una persecución que atravesó calles y delegaciones, con patrullas solicitando refuerzos por radio.

La huida terminó en segundos de estruendo. El Kia Rio se estrelló contra un Ford Fiesta en el cruce del bulevar Federico Benítez y la avenida Enrique Silvestre, a un costado de la Plaza Navarrete. Vidrios sobre el pavimento, el eco de los frenos y la adrenalina desbordada marcaron el final de la carrera.

En el lugar fueron asegurados: Angelo Armando, de 17 años, quien conducía; Javier M., también de 17, en los asientos traseros; y Valeria Alexandra, de 19, quien iba en el copiloto y había solicitado originalmente el servicio de Uber.

El caso quedó en manos de las autoridades, pero el incidente deja un retrato inquietante: adolescentes y una joven convertidos en asaltantes improvisados, una ciudad entera puesta en riesgo por minutos de violencia, y un conductor que vio cómo una noche de trabajo se transformaba en pesadilla.